Por Francisco Cuyás
Rigol considera que: «De nadie se ha escrito más gratuitamente que del fundador de la Academia San Alejandro». Pero él mismo no deja de caer en la trampa y hasta ahora los más coherentes datos biográficos nos lo presenta en su ensayo La Academia de San Alejandro, que con un sarcasmo a veces incisivo e hiriente intenta poner en solfa los pormenores e irregularidades de tan importante escuela, la que más polémica ha provocado en el país desde su fundación. Escribe sobre Vermay:
«Sea como fuere, este epígono de Luis David y protegido del propio Emperador, viene a dar a nuestras playas cuando el imperio se derrumba. Al llegar tenía 31 años. Había nacido en Tournai (Francia) en 1784. Discípulo de David se relaciona a través de éste con Napoleón Bonaparte y es maestro de la hija de Josefina Beauharnais, Hortensia futura reina de Holanda».
El salón de Josefina Beauharnais, donde según Lezama Lima: «sólo se reclutan oficialillos tendenciosos».
Vermay presenta un extenso curriculum que sus condiciones de pintor ponen en duda. Parece que las investigaciones dan por cierto algunos datos sobre su vida, hasta Rigol se ve precisado a admitir las relaciones con David como maestro, pero al establecer un cuadro completo de su historial daría como resultado una hoja de servicio demasiada rica para tan pobre pintor. Talmente parece que la leyenda del hombre superó al artista. El desconocimiento y la duda se ciernen sobre este hombre, en realidad: «sabemos muy poco de la prehistoria de Vermay».
Esteban Valderrama en su ensayo La Escuela Nacional de Bellas Artes San Alejandro, no dedica líneas a la condición de pintor de Vermay, y con un tono "amistoso" reseña algunas situaciones de la trayectoria familiar del francés, hasta lograr escribir detalles del destino de algunos hijos y con quien casaron en Cuba. Su posición revolucionaria y amistad con Heredia, hecho que motivaron los versos que aparecen a manera de epitafio en la tumba del artista. De su obra sólo se limitó a comentar «dejó muchas obras pictóricas como las que se admiran en El Templete, así como innumerables retratos de su época y varios paisajes».
Exagera Rigol cuando plantea que: «Vermay trajo en sus maletas el cadáver del neoclasicismo», semejante encomienda bastaría para situarlo en la historia de las artes cubanas, era muy temprano para que el neocla-sicismo fuese cadáver, muy aventurado el planteamiento para situarlo sobre los hombres de un solo individuo. Lo cierto es que su presencia abrió un paréntesis en la historia plástica cubana y fue director de la primera escuela que según Valderrama debía su fundación en parte: «a las gestiones del eminente pintor español Don Francisco de Goya y del Duque D'Orleans quienes enviaron con Vermay sendas cartas de presentación al Obispo Espada».
Vermay muere el 30 de marzo de 1833, «Heredia envió desde México» los versos que aparecen en su tumba. Casi un año antes el 13 de agosto de 1832 el curador general de la Real Sociedad, Don Tomás Agustín Cervantes "hizo notar" en el primer reglamento, en su Art 1, según apunta Valderrama: «La Academia gratuita de Pintura y Dibujo de La Habana, instalada en 11 de enero de 1818 en el convento de San Agustín se denominará San Alejandro en grata memoria de Don Alejandro Ramírez, intendente del ejército, superintendente general, subdelegado de Real Hacienda y Director de la Real Sociedad Económica por debérsele su fundación y progreso».
Unos meses antes de la muerte de Vermay se había declarado el 26 de enero de 1833 por Real Orden de S.M. como Sección de la Real Academia de Nobles Artes de San Fernando de Madrid, "con el mismo plan general de enseñanzas de las sociedades patrióticas de 1818".
(Tomado de: Breve Historia de la Academia Nacional de Artes plásticas. “San Alejandro”, enero 1996, Juan Bautista Vermay, páginas 14-16) (Fondos BNCJM).
Directores de la Academia San Alejandro
1818 Juan Bautista Vermay
1833 Francisco Camilo Cuyás
1836 Guillermo Colson
1843 Joseph Leclere
1852 Federico Mialhe
1858 Hércules Morelli
1958 Augusto Ferrant
1959 Francisco Cisneros
1978 Miguel Melero
1907 Luis Mendoza y Sandrino
1926 Juan E.Hernández Giro
1926 Armando G.Menocal
1934 Leopoldo Romañach
1935 Esteban Valderrama
1935 Manuel Vega
1939 Esteban Valderrama
1942 Enrique García C.
1946 Domingo Ramos
1947 Mariano Miguel
1949 Esteban Valderrama
1950 Leopoldo Romañach
1950 Esteban Valderrama
1959 Enrique Caravia
1959 Carmelo González
1961 Florencio Gelabert
1962 Fausto Ramos
1963 Josefina González G.
1967 Luis Fuentes Quesada
1967 José de Lázaro Bencomo
1968 Mercedes Sotto
1970 Amhed Safille
1972 Roberto Martínez
1973 Armando Prieto
1974 Jorge Samper
1975 Juan Sánchez
1977 Celia Morán
1981 Jorge Rodríguez
1990 Jorge Ferrero
1993 Miguel Fagundo (actual director)
(Tomado de: Breve Historia de la Academia Nacional de Artes Plásticas San Alejandro, enero 1996, Directores de la Academia San Alejandro, páginas 51-52) (Fondos BNCJM).
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